Hipotecas Recargables
Os presentamos un nuevo producto hipotecario, las hipotecas recargables, que probablemente verá la luz a lo largo del año que viene a través de la reforma de la ley hipotecaria prevista para comienzos de 2007.
Ante la actual situación de sobreendeudamiento de los hogares españoles han sido diversas las apuestas del gobierno para suavizar esta problemática, apostar por las hipotecas mixtas, desarrollar las hipotecas inversas, o la llegada de las nuevas hipotecas recargables.
Esta nueva opción, las hipotecas recargables, permitiría que un cliente que ya haya amortizado una parte de su hipoteca pueda volver a solicitar dicho dinero para hacer frente a nuevos gastos - compra de coche, reforma de la vivienda, ... -
En la medida en que no se amplia el capital de la hipoteca los gastos que implicará esta operación se minimizarán resultando una opción mucho más aconsejable que la solicitud de los llamados créditos personales.
Mi opinión personal es que cada día nos acercamos más a la vida hipotecada. Es decir, la hipoteca nos acompañará prácticamente desde nuestro nacimiento hasta el fin de nuestros días. Los bancos nos proporcionan capital y nosotros les pagamos anualmente unos intereses (Euribor) que mantengan sus cuantiosos beneficios anuales.
En cualquier caso, ninguna de estas medidas ataja la raíz del problema - el desproporcionado precio de la vivienda -, y simplemente ofrecen nuevas vías de financiación para que podamos afrontar nuestras necesidades consumistas.
Ante la actual situación de sobreendeudamiento de los hogares españoles han sido diversas las apuestas del gobierno para suavizar esta problemática, apostar por las hipotecas mixtas, desarrollar las hipotecas inversas, o la llegada de las nuevas hipotecas recargables.
Esta nueva opción, las hipotecas recargables, permitiría que un cliente que ya haya amortizado una parte de su hipoteca pueda volver a solicitar dicho dinero para hacer frente a nuevos gastos - compra de coche, reforma de la vivienda, ... -
En la medida en que no se amplia el capital de la hipoteca los gastos que implicará esta operación se minimizarán resultando una opción mucho más aconsejable que la solicitud de los llamados créditos personales.
Mi opinión personal es que cada día nos acercamos más a la vida hipotecada. Es decir, la hipoteca nos acompañará prácticamente desde nuestro nacimiento hasta el fin de nuestros días. Los bancos nos proporcionan capital y nosotros les pagamos anualmente unos intereses (Euribor) que mantengan sus cuantiosos beneficios anuales.
En cualquier caso, ninguna de estas medidas ataja la raíz del problema - el desproporcionado precio de la vivienda -, y simplemente ofrecen nuevas vías de financiación para que podamos afrontar nuestras necesidades consumistas.
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